miércoles, 20 de enero de 2010

Que nos paso?




Aquellas caricaturas de mi infancia me hicieron pensar que en realidad no tuve un crecimiento mental adecuado. Asi que, en estas lineas hare el intento de explicar como es que yo creo que tanta caricatura y serie me hizo debil, fragil, sentimental al mismo tiempo que inculcaban en mi un machismo enfermiso y ganas desquisiadas de subyugar a cualquier femina que se me pusiera enfrente (aunque siempre fuese al reves, por culpa de las ya mencionadas caricaturas, y mi abuela, pero eso es harina de otro costal). Ese comportamiento lleva a cosas no muy de hombre (soy hombre, no vieja gorda aparentado ser viejo gordo). entonces ire paso por paso, desahogando estos sentimientos (causados por esas series de debiles) que me hacen sentir que voy a estallar.


primero que nada dejen les aclaro que no soy de preferencia homosexual, aunque prefiero a un joto que a un wey muy pinche macho para platicar. Sera porque los machos creen que todos los demas hombres somos tan machos como ellos. Pero, no lo somos y la neta no quiero romper ilusiones.

Entonces, mi infancia y juventud se vieron marcadas por el abuso nippon de la sangre y de temas homoeroticos. la prueba mas contundente (por no decir candente y sonar mas joto) esta en los caballeros del zodiaco. y no hare una explicacion de tres cuartillas de porque esa serie tiene tanto contexto para jotear. Lo que si hare es presentar lugarcillos donde yo me sentia incomodo con la trama de esa serie. Tengo que mencionar que mi incomodidad no era en presenciar lo que los personajes actuaban, sino lo que yo pensaba en mis adentros -Al churro. Si mi primo O'molly se congelara y medio muere, no voy a abrazarlo para revivirlo con mi calor. FAAAAk EEET!- que fue lo que Shun hace por Hyoga en algun episodio.


Fags!

Otra cosa, todos, TODOS, los caballeros se pelean por Atena. Sea para salvarla o para matarla, el punto es que nadie pone el cuello en la linea por tirarse a la mona esa. Osea, si yo fuera uno de los caballeros, pensaria en casarme con una diosa (literalmente) y hacer una nueva raza de super hombres, una bola de herculeses. Pero no, los caballeros quieren salvar a Atena solo para seguir entrenando debajo de sus cascadas y pensando en sus herman@s perdi@s. Como niño, eso te hace pensar en si deberias pedirle a rosita, la del 2B, un beso. O solo putearte al Fermin, que tiene desde el kinder molestando a rosa, solo para tu seguir jugando al fut con los demas mocosos. Y como estas, muchas. En que etapa se vuelve uno en Gaston y no se queda siendo un pinche bob esponja? Eso seguro me lo perdi.

Y recientemente este descontento me volvio, pues esta en que las caricaturas de ahora son menos violentas fisicamente, pero mucho mas violentas emocionalmente. Son violentas en un contexto pasivo, pues. Que tienen que ver estas caricaturas con mi crecer emocional? Pues que aun las veo y soy altamente influenciado por ellas. Al punto que alguna compra la puedo basar en si un producto tiene algun mono de nick en la caja, o no. Asi de miedo me da que llegue Sam, de iCarly, y me meta un trozo de tocino en la oreja por no comprar su shampoo.



Pero encontre una pequeña salida, diminuta casi. En los modelos, las figurillas que se compran de vinil o simple plastico, donde no hay que saber el canon de la historia para disfrutar de un rato de entretenimiento con las sutiles formas de las estatuitas. ahi, si quiero puedo pensar que midori no hibi es en realidad un alien que viene a poseer todo en la tierra. o que epona es solo uno de los caballos de los guerreros del apocalipsis. sniff, la vida se vuelve mas facil por un momento. Claro, antes de que mi silencio harmonioso sea destruido por un alarido de parte de mi abuela o sardina que me invocan para pedirme que haga algo. Pero esos momentos de irrealidad, son suficientes para llenarme de algo de caracter y tonificar mi espiritu. Eso si, en las paris sigo prefiriendo platicar de temas burdos como el release de nuevos viniles o la gran abilidad de ciertas gemelas para combinarse. Soy falto del abolengo del futbol o la gracia del Americano. que le voy a hacer, los deportes homoeroticos nunca me llamaron mucho la atencion. me quedo con el deporte de ultimate surrender.

1 comentario:

Pollini dijo...

jeje pues no podría hablar mucho sobre este tópico, las únicas caricaturas que veía eran las de Garfield y unas bien cotorras donde un monito les concedía deseos a un grupo de niños, pero que éstos ya no existían al atardecer... estaba bien chida...

saludos!